Intendentes peronistas llamaron a la unidad para derrotar al macrismo en las próximas elecciones

Bajo el lema “Otro Camino es Posible”, los dirigentes bonaerenses más allegados al kirchnerismo se mostraron sin fisuras en el acto que tuvo lugar en el Club Ferro de Merlo, y convocaron a conformar un frente más amplio para dar pelea en los comicios de 2019.

17/10/2018
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El sol cae amedrentado por las nubes grises en el conurbano bonaerense. El calor de la jornada y las multitudes se siente en las cuadras que rodean al Club Ferro de Merlo. Los militantes se agolpan en la entrada angosta para poder ingresar al acto.

Hay movimientos bruscos, enojos y personas que levantan las manos para detener la envestida de un grupo de hombres que hacen fuerza para ingresar, mientras la voz del estadio pide tranquilidad a los “compañeros que ya van a poder entrar”.

Es el acto del peronismo más acérrimo al kirchnerismo por el Día de la Lealtad. El partido de Merlo fue el lugar elegido y no es casual. Allí se erige su intendente y presidente del PJ bonaerense, Gustavo Menéndez. El peronismo federal eligió Tucumán, mientras un grupo más neutral, encabezado por Agustín Rossi y el sanjuanino José Luis Gioja, prefirió la provincia de Corrientes.

Minutos antes de las 19 horas, Menéndez ingresa a la sede acompañado del diputado nacional Fernando Espinoza. “Nos acompañan dirigentes políticos, sociales y sindicales y hemos mandado adhesiones a todos los actos que se realizan a lo largo y ancho del país”, señala el intendente anfitrión en su llegada.

Espinoza también detiene su paso para hablar con los medios. Casi sin pensar, responde cada pregunta de manera protocolar y destaca la importancia de que el acto se realice en Merlo al considerar que es la ciudad de su “presidente”, pero también el lugar elegido por todos los intendentes para manifestar su respeto y liderazgo.

Unos metros más atrás se encuentra Karina Menéndez, secretaria de Desarrollo Social local y hermana del jefe comunal. Su presencia es llamativa y acepta cada entrevista con una calidez poco común en ese ambiente. “Para mí es un orgullo que en mi Merlo se esté viviendo esta fiesta que es del peronismo, pero si hubiera sido en otro lado también hubiéramos sido miles”.

Consultada sobre si existe una relación entre el lema del evento y el armado político del próximo año, asiente y reflexiona sobre la unidad del peronismo: “Creo que somos grandes, vemos sufrir nuestro pueblo y eso es lo único que nos tiene que importar. Ya es tiempo que dejemos los egos de lado. Sueño con eso y vamos a trabajar para hacerlo realidad”.

Otros intendentes se acercan a la sala y piden por “el tano” (Menéndez), dicen que “se apure” que ya va a empezar el acto. Y el mandato hace efecto. Un grupo de hombres envuelve al intendente y como un torbellino lo saca del lugar sin escalas hasta el escenario, donde seguido al himno nacional habla Fernando Grey, primer orador de la noche.



Le siguen la dirigente de Cañuelas, Marisa Fassi, el jefe comunal de 25 de Mayo, Hernán Ralinqueo, Fernando Espinoza y el propio Menéndez, a cargo del cierre. Abajo aplauden otros ejecutivos municipales del conurbano, diputados nacionales y dirigentes sindicales. La presencia de Máximo Kirchner fue la más referenciada.



Hacia el final del acto, la idea de conformar un frente más amplio y representativo vuelve a resurgir en el discurso del presidente del PJ bonaerense, que vaticina el triunfo del peronismo en el territorio provincial y nacional, y marca este día como “el inicio del camino de regreso”. La tradicional marcha peronista da el pie para el cierre y la foto grupal. Los militantes bajan las banderas y se alejan, pero el calor persiste y se asienta.