Farré pidió perdón a sus hijos y aseguró que no puede justificar lo que pasó

El acusado por el crimen de Claudia Schaefer pronunció sus últimas palabras en el juicio y decidió leer una carta a sus hijos. En tanto, los fiscales que interviene en el caso piden que se lo declare culpable ya que se trató de un "femicidio de manual y a sangre fría".

05/06/2017
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"Daría mi vida y la cambiará para que yo me fuera y ustedes estén con su madre, pero acá estoy y tengo que seguir viviendo por ustedes. Quizás esta sea la única razón por la que vivo y sigo adelante", leyó Farré en su cara dirigida a sus hijos. 

Cabe recordar que el imputado atacó a su esposa el 21 de agosto de 2015, en el country Martindale, del partido de Pilar, y la asesinó a puñaladas. Por este motivo, las fiscales Carolina Carballido Catalayud y Laura Zyseskind, que intervienen en el juicio, pidieron al jurado que lo declare culpable, al considerar que cometió un "femicidio de manual y a sangre fría".

Al alegar ante el Tribunal Oral Criminal 2 de San Isidro, Esteban Andrejín, y los 12 miembros del jurado, las fiscales señalaron que el imputado cometió el crimen "de la forma más cruel", que "tenía plena conciencia de todo lo que hizo ese día" y que "decidió y quiso cada uno de los pasos que tomó ese día, desde hacerse de los cuchillos hasta terminar de degollar a esta mujer".

Las fiscales apuntaron directamente contra la estrategia que planteó la defensa, en la que afirman la inimputabilidad del acusado, y expresaron al jurado: "Les pedimos que no voten por la inimputabilidad, este señor no puede ser declarado no culpable porque sabía lo que hacía".

"Farré decidió matar a su mujer sin una gota de piedad, a sangre fría y de la forma más cruel, sin importarle las consecuencias", apuntó Carballido y agregó: "Durante el juicio se probó que la relación se daba en el marco de violencia de género, donde había violencia física, psicológica, verbal y económica".

De acuerdo con Carballido, "si bien la defensa intentó sin éxito demostrar que Farré no ejercía violencia de género, todos nuestros testigos coincidieron en que Claudia era una sometida. Farré no sólo era violento con su mujer sino en todos los ámbitos de su vida".

Asimismo, la fiscal recordó que al momento del crimen Farré se encontraba en posesión de los documentos de los tres hijos de la pareja y utilizó esto como "anzuelo" para llevar a su mujer hasta la escena del crimen. "Claudia fue con su abogado por precaución pero Farré le terminó dando lo que él quiso: asesinarla, es un femicidio de manual y a sangre fría"denunció.

En tanto, Zyseskind aseguró que "la fiscalía probó que tenía la mente sana y que premeditó el hecho". Además, amplió: "No había ninguna psicosis, ningún retraso madurativo, al contrario, todos los testigos dejaron claro que el señor es muy inteligente".