El Gallo y el Mirasol no se sacaron ventajas en el clásico del Oeste
Fue un pobre 0 a 0 en el Nuevo Francisco Urbano. Lo interesantes estuvo fuera de los 90 minutos, ya que, el encuentro le sirvió a los hinchas para festejar el título y el ascenso, y para ver cómo los jugadores recibían el trofeo y daban la vuelta olímpica.
En un marco de pura celebración Deportivo Morón y Almirante Brown le brindaron poco al espectáculo desde el campo de juego. Con pocas situaciones de peligro, ambos equipos se prestaron la pelota y generaron poco fútbol. Si bien el local dominó el trámite, dos errores arbitrales del lineman, le impidieron a la visita pasar al frente.
La emoción, dentro de los minutos de partido, estuvo en el gesto del DT campeón, Walter Otta, que incluyó entre los titulares a Gerardo Martínez. El 10, jugador clave en la obtención del ascenso, quedó relegado por una lesión en uno de sus riñones, estuvo en cancha 23 minutos y salió para la ovación de la gente. Mezcla de aplausos y despedida ya que todo indica que el futbolista continuará su carrera en el fútbol árabe.
La emoción llegó después
El Gallo tuvo su noche de gloria, celebración y éxtasis con vuelta olímpica incluida. Luego de 27 años de sequías, al grito de Dale campeón, hinchas, futbolistas, cuerpo técnico y dirigentes se unieron en un festejo. Un show de fuegos artificiales y la ovación merecida acompañó a los campeones.
Deportivo Morón jugará la próxima temporada en el Nacional B, la segunda categoría del fútbol argentino.
La entrega de la copa al campeon Deportivo Moron pic.twitter.com/FyNk9ietYI
Club Deportivo Morón (@DepMoronOficial) 21 de junio de 2017